Imagen de Cortegana, con su Castillo Medieval al fondo
Transcurría placidamente una de las primeras tardes de la primavera amorosa y pasional , cuando sentado ante mi ordenador, una vez mas y hablando de mi amada Cortegana, me envolví de cierto misterio , de cierta oda , de cierta sensación de romanticismo, para volver a establecer una relación entre Cortegana y el amor. O sería mas correctamente decir, entre Cortegana y las canciones de amor, que pueden sonar en cualquier equipo musical. Que pueden ser trasladadas, a través de las ondas de la radio. Que pueden buscar un encuentro único, entre dos enamorados, en este caso entre esa mujer hecha pueblo de nombre Cortegana y el autor de estas líneas. Para revivir en esas canciones la voz de Roberto Carlos y establecer en una unidad única
“ Un millón de amigos “. Si, un millón de amigos, para así mas fuerte poder cantar. Para así, mas fuerte poder exaltar la semblanza de la amistad. Para así, mas fuerte, poder establecer nuevos cauces, entre la voluntad y el destino. Un millón de amigos los que están en el corazón de mi amada Cortegana, para unificarnos en amores comunes, en pasiones tan difícilmente entendibles para el “forastero “, sino conoce la verdadera historia. Y volver a viajar hasta Brasil ahora con la voz de la bellísima Tamara, y reencontrarnos con la historia de amor, que tiene como único testigo
“ El gato triste y azul “. El mismo gato, cuyos ojos en la oscuridad de la noche serrana, brillan como luceros en los ojos de la amada. Canciones de amor a Cortegana , para volver piropear a través del sentido de la música y de la paz. A través de partituras y pentagramas, a esta bellísima mujer, que a su manera, también nos ama, para sintonizar en plena siesta estival, la historia de un
“ Velero llamado Libertad “ para imaginar un viaje marítimo acompañado de gaviotas y entre el viento marino, ir un lugar de la vieja América, y encontrar en el mismo a personajes que enorgullece la historia de esta pueblo amado.
Tu ,Cortegana. Tu, celestial presencia mariana en la Virgen de la Piedad, Tu, encuentro entre algodones de paz. A ti, podemos cantarte aquello de “ por ella /el amor y el odio / la paz y el tormento “, Por ella, sueños inalcanzables. Por ella , esperanzas de nueva infancia , para dejar una sentencia clara y contundente , “ Esa chica es mía “. Si, aunque de mi no te hable, se que esta mujer - insisto –llamada Cortegana, me ama para establecer su amor, cuando paseo por sus calles, y siento entonces el susurro de una hermosa sevillanas, para decirle que “soy un caballero yo / en las cosas del querer “. Canciones de amor a Cortegana, para hacerle una hermosa declaración a los pies de nuestro castillo, y cantarle aquello que dejo en el mundo musical Lorenzo Santamaría , “ si tu fueras mi mujer / mi compañera / todo seria distinto / de otra manera “. Sigo dejando en estas líneas un canto sagrado a la mujer serrana que vive en Cortegana para decirle a mi fiel amigo, “ si tu la vieras con mis ojos “ y encontrar en esa mujer un “ Corazón de papel “, o tal vez, pisar el viejo “ Caminito “. Caminito que entonces estaba bordado de trébol y junto en flor.
Y sentir, que ese amor , a veces , solo a veces , se me escapa debido a “ Esta cobardía de mi amor por ella “. Sera entonces, el momento de ver los ojos de la mujer deseada y cantarle su canción amada para encontrar en la belleza de “ Soledad “ y convertir a ella “ en mi dulce y fiel compañera “. Cortegana y sus canciones de amor. Cortegana, y su sentimiento profundo. Cortegana, y su desahogo en el alimento del alma. Cortegana , si , Cortegana, recibe en estas líneas una nueva declaración amorosa de este hombre que te ama.
